Con gran tristeza, Páramo comparte la noticia de que la hermana Esther Castaño Mejía falleció el 22 de agosto de 2023, a los 94 años de edad, después de un breve tiempo en el hospital rodeada de personas a las que amaba.
Nick Brown, el fundador de Páramo Directional Clothing, que ha trabajado estrechamente con la Hermana Esther y “Creaciones Miquelina” durante más de tres décadas, viajó a Colombia para estar con ella durante sus últimos días. Será recordada con cariño por su inquebrantable energía en proyectos que beneficiaban y empoderaban a los demás, y esta noticia pone fin a una era de dos personas increíbles que demostraron que la colaboración, la visión y el empuje superan la adversidad.
La hermana Esther Castaño Mejía nació en Medellín e ingresó en la orden de las Adoratrices a los 17 años. Esta comunidad religiosa llegó a Colombia en 1929 para responder a la necesidad de las mujeres marginadas que eran explotadas. Su propósito era empoderar a las mujeres a través de la formación y el desarrollo personal. Desde finales de la década de 1950 hasta principios de 2010, esta labor se llevó a cabo en un contexto de guerra civil que asolaba Colombia. En 1977, la hermana Esther puso en marcha Creaciones Miquelina, una fábrica donde podía ofrecer a las mujeres un refugio seguro y formación profesional. Con valentía, salió a las calles y a los barrios rojos para hablar con las mujeres, ofreciéndoles una forma de reintegrarse en la sociedad y proporcionándoles el apoyo emocional y espiritual necesario.
Cuando conoció a Nick, ella tenía un pequeño taller y un par de máquinas de coser, ciertamente no una fábrica comercialmente viable, pero había una determinación compartida de permitir que la ropa de alta calidad que Nick quería hacer tuviera un propósito secundario, para permitir que las mujeres de la hermana Esther prosperaran. Hablaban a menudo de los retos a los que se enfrentaban y de las dudas que tenían, cuando en una ocasión, la hermana Esther le dijo a Nick: “Entiendo todo esto, pero tú tienes fe, ¿verdad?”. Nick no pudo decir que no a la confianza, la determinación y el carismático brillo en los ojos de esta increíble mujer, algo que permaneció con ella durante toda su vida.
Durante 25 años, la hermana Esther influyó en la vida de miles de personas a través del asesoramiento y el liderazgo. Su entusiasmo y su convicción transmitían sin esfuerzo sus ideas y su pasión a las personas con las que trabajaba. A los 80 años, dejó de dirigir la fábrica, pero nunca bajó el ritmo: volvió a las calles, guiando y apoyando a las mujeres de Bogotá, como era el propósito de su vida.
En 2017, Creaciones Miquelina obtuvo la certificación en “Comercio justo garantizado” de la Organización Mundial del Comercio Justo y todas las prendas de Páramo fabricadas actualmente llevan esta etiqueta. Esta acreditación fue muy importante para la hermana Esther y las mujeres que trabajan en Miquelina, ya que se alinea con su misión original: apoyar el desarrollo social con la visión de construir un futuro mejor para las personas.
La distancia entre Colombia y el Reino Unido es de 8.500 kms o 5.282 millas, pero durante los últimos 30 años, la hermana Esther, junto con Nick Brown, acortaron esa distancia. El trabajo que empezaron juntos hace tantos años, está en el corazón de las marcas, es una fuente contagiosa de energía, algo de lo que cada persona dentro de Páramo y Miquelina (ahora GearForm SAS) se siente increíblemente orgullosa de formar parte. En 2022, Creaciones Miquelina se unió a Páramo y Nikwax como parte del fideicomiso propiedad de los empleados, GEARFORM, una asociación que llenó de orgullo tanto a la hermana Esther como a Nick.
Dice Richard, nuestro director comercial en el Reino Unido: “En 2022, conocí a la Madre Esther en persona y la escuché hablar sobre su historia de vida y sobre el futuro. A pesar de que la escuche por intermedio del interprete que nos ayudó con la traducción, su entusiasmo y convicción, para no mencionar el brillo en sus ojos, eran evidentes cuando hablaba de Miquelina y del impacto positivo que Miquelina y Páramo han tenido en tantas mujeres.Fue un privilegio haber pasado este tiempo con ella y, ahora entiendo, cómo Nick y la Hermana Esther pudieron trabajar tan bien juntos, durante tantos años. Ella era realmente una mujer inspiradora.
Hermana Esther Castaño Mejía, en nombre de todos en Páramo, tanto ahora como en el futuro, te damos las gracias, te echamos de menos y prometemos continuar tu legado”.