Adoratrices: Celebramos la vida y legado de Santa María Micaela en su fiesta

Adoratrices: Celebramos la vida y legado de Santa María Micaela en su fiesta

El 15 de junio es una fecha marcada en el calendario de las Adoratrices y para toda la Familia Adoratriz: celebramos la fiesta de Santa María Micaela, fundadora de nuestra Congregación. Hoy especialmente recordamos el legado vivo que dejó: ¡Micaela VIVE!

Palabras de nuestra Superiora General, Hna. Pilar Casas

Con motivo de esta fiesta, este año 2024, nuestra Superiora General, Hna. Pilar Casas, subraya que este “es un día grande” en el que:

Celebramos la vida de Micaela, esa vida que hoy sentimos tan cercana, tan viva, tan amante de su comunidad y de sus chicas, ‘¡hoy al comulgar le dije al Señor! «¡cómo se las quiere!» Y me hallé que él las quiere también mucho. ¡Con que placer lo sentía yo!, ¡mis hijas te aman!, y tú me lo dices!, …y, ¡tus las amas a ellas!’ (Conf. Carta a la Hna. Caridad. 11 de mayo de 1859). Es la capacidad de saber recibir y de saber dar en el juego incesante de la vida de vivir y actuar. Micaela nos transmite ese saber agradecer en cada momento que Dios nos quiere y que tiene un plan para que seamos felices, reconociéndonos unas u otras en aquello que podemos aportar desde lo que cada una somos.

Celebramos la capacidad de Micaela de reconocerse a sí misma, de afrontar la realidad que tiene que vivir en el AQUÍ, Y AHORA de su tiempo ‘dudo yo que haya en el mundo superiora ni más acusada, ni más calumniada, ni más reconvenida…Solo a Él temo y me consuela mucho tenerlo como testigo de mi torpeza en los negocios…’ (Conf. C. Hna. Caridad, 22 de mayo de 1859). Mujer de esperanza, asumiendo riesgos, preparada para lo imprevisible ‘Ya me tiene usted aquí, a pesar de la prensa que en moldes me pone en Madrid…no sea cobarde, que las cosas nerviosas apuran mucho’, (Conf. A la Señora Canedo 27 de febrero de 1862), luchando, unida a sus hermanas, por tantas mujeres, provocando a otros para continuar en la misión, ‘que no desmayen por Dios y dejen de dar pasos, por más obstáculos que se presenten’ (Conf. C. Don José Iglesias Martin Madrid 7 de enero de 1864).

Celebramos a Micaela, mujer a la escucha, que admira y adora la presencia de Dios en su vida, en un movimiento de amor-acción que la lleva a sentir y dejarse invadir por el Espíritu, proclamando ¡Bendito sea Dios mil veces! Mujer de esperanza, su misión se ha ido extendiendo por el mundo consolidándose en el espacio y en el tiempo.

Celebramos que su presencia sigue viva entre laicas y laicos que se han ido adhiriendo a la misión desde diferentes culturas y países, profundizando inclusivamente en el carisma Adoratriz y en la respuesta que debemos dar, en sinodalidad, a las necesidades de las mujeres a las que acompañamos. Micaela nos invita HOY, AHORA, en MISIÓN COMPARTIDA, a abrir caminos para las próximas generaciones en nuevas formas de vida consagrada y laical al servicio de la Misión.

Celebramos este 15 de junio con Micaela, viviendo con un enfoque Sinodal, de Sororidad (mujeres y hombres en camino), amando, reconociéndonos con todo aquello que somos, percibiendo la claridad de la presencia de Dios en medio de nosotras y nosotros. Insistiendo en seguir construyendo una congregación humilde, formada por comunidades abiertas, cálidas, fraternas con sabor a evangelio donde, hermanas, laicos y laicas se sientan llamadas y llamados a vivir la Misión en fraternidad”.

Actos de celebración por la festividad

Invitamos a toda nuestra comunidad a participar en las actividades programadas para este día en los distintos lugares en los que existe presencia Adoratriz, que incluyen la Eucaristía en su honor y momentos de Adoración y celebración.

Breve biografía de Santa María Micaela

Santa María Micaela del Santísimo Sacramento, conocida en su vida secular como Micaela Desmaisières López de Dicastillo es natural de Madrid, España. Nacida el 1 de enero de 1809 en el seno de una familia noble, desde joven, Micaela sintió un llamado especial hacia las personas más desfavorecidas.

En una visita a los enfermos del hospital de San Juan de Dios en Madrid (España), descubrió los problemas de la explotación, la soledad y el desamparo en que se encontraban muchas jóvenes y mujeres que vivían en contextos de prostitución. Así surgió la primera idea de abrir una casa para acoger a estas jóvenes a su salida del hospital y acompañarlas a rehacer su vida con dignidad.

En 1845, Micaela funda la primera casa-colegio en la calle Dos Amigos 8 de Madrid. Desde 1850, ella asumió totalmente la dirección de esta, se quedó a vivir con las jóvenes y tomó el nombre de Madre Sacramento. Asimismo, buscó la colaboración de maestras para que la ayudaran en la educación de las mujeres.

La obra de Santa María Micaela se extendió pronto a otras ciudades de España: Zaragoza (1856), Valencia (1858), Barcelona (1861), Burgos (1863), Santander (1864) y Pinto (filial de Madrid, 1864).

Otras mujeres (maestras del Colegio y jóvenes de su entorno social) se unen a Micaela, atraídas por el modo de vivir el amor a Jesús Sacramentado y la entrega al servicio de la mujer en situación de prostitución. Este será el germen de la Congregación de las Adoratrices, Esclavas del Santísimo Sacramento y de la Caridad. En 1856 se reúne el primer grupo, que, con la aprobación eclesiástica, empezará a vivir con su fundadora este nuevo carisma de Adoración y Liberación.

En agosto de 1865, al enterarse de que en Valencia estalla una epidemia de cólera, Micaela decide viajar en tren para ayudar a las religiosas y mujeres de esa casa durante la epidemia. Allí se contagió de la enfermedad de un modo irreversible. Murió en dicha ciudad, víctima de la caridad, el 25 de agosto de 1865.

Fue canonizada por el papa Pío XI el día 4 de marzo de 1934.

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